Con más de 175 años de historia a sus espaldas, la Guardia Civil es una de las instituciones más queridas en nuestro país. Además de sus emblemas y símbolos oficiales, el tricornio de la Guardia Civil es seña de identidad de este cuerpo policial.

Sigue leyendo si quieres conocer el origen del tricornio, sus características y cuál ha sido su evolución y uso hasta la actualidad.

Cuál es el origen del tricornio

Para conocer el origen del tricornio de la benemérita debemos remontarnos hasta 1844, año en el que el Duque de Ahumada funda la Guardia Civil con el objetivo de velar por el buen orden, mantener la seguridad pública y proteger la propiedad privada de la delincuencia y del bandolerismo que asolaba las zonas rurales a mediados del siglo XIX.

En ese mismo año, el 1 de septiembre de 1844 se presentó de manera oficial el Cuerpo en un desfile, se mostró la uniformidad y se utilizó el tricornio como su nota más distintiva basándose en el sombrero original de tres picos francés. La reina Isabel II y el General Narváez decidieron extender el uso de este sombrero al resto de fuerzas militares para así dotar al ejército de un aspecto elegante y severo.

Por qué lleva el tricornio la Guardia Civil

El primer modelo de tricornio de la Guardia Civil nada tiene que ver con el que se utiliza hoy en día, aunque actualmente el que fuera sombrero de tres picos ha quedado relegado al uniforme de gala. Basándose en el tricornio francés, el tricornio de la Guardia Civil destacaba por su presencia, elegancia y atractivo, además de conferir al guardia de rigor y disciplina, dos cualidades que se pretendían transmitir a la sociedad y utilizarse como método disuasorio contra los malhechores que arrasaban, con el bandolerismo en todo su apogeo, las zonas rurales y agrarias de los campesinos.

Características del tricornio

En su forma original, del tricornio resaltaba la forma recta y elevada del ala trasera y el ala delantera curvada y ajustada a la cabeza, las cuales daban paso a dos picos horizontales sobre las orejas. Estaba fabricado en fieltro negro y además de ser costoso para el Reino, era poco útil y muy fácil de deteriorarse, especialmente a pleno sol o cuando había lluvia.

Con el paso del tiempo el tricornio fue mejorando gracias a las fundas de hule que las mujeres de los guardias les confeccionaban para combatir el sol y la nieve. Estas fundas estaban acopladas al sombrero del Guardia Civil por debajo de los picos y eran de gran utilidad. El sombrero también incluía una presilla de galón en la que se sujetaba una escarapela con los colores de la nación rematada con un botón sobre la pala frontal.

 

Ahora que ya conoces cuál es el origen del icónico sombrero de la benemérita y para celebrar sus más de 175 años de historia, te recomendamos que no te pierdas la colección de relojes oficiales de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Relojes que cuentan con la autorización oficial del Cuerpo e incluyen los símbolos personalizados de esta unidad especializada de la Guardia Civil.